martes, 19 de agosto de 2008

17.000 personas no hacen ruido por Gemma Mengual

Ahora mismo son las diez y media de la noche en Pekín y me están dando el imprescindible masaje. Mañana volvemos a competir en la rutina libre, segunda de las tres etapas del dúo de natación sincronizada que deben conducirnos, ojalá, a una medalla olímpica. Estoy bastante rota pero hemos empezado vestidas de plata y eso te da ánimos para continuar.
El trabajo no termina en la piscina aunque estés en plena competición. Hace un rato Andrea Fuentes y yo, bajo la supervisión de la seleccionadora Anna Tarrés, hemos estado repasando el vídeo de nuestra rutina técnica... y también el de las rusas. Hemos visto dónde hemos tenido algún pequeño desajuste (en la sincronizada no se cometen errores, sino desajustes, mira tú por dónde) para que no vuelva a suceder y nos hemos fijado en qué hacen mejor las 'Anastasias' que nosotras porque de esta manera, conociendo sus virtudes y sus defectos, que también los tienen, podemos aspirar a superarlas. Siempre se puede mejorar, siempre.
En plena competición olímpica lo básico es recuperarse bien. Mi programa en Pekín incluye competir cinco días consecutivos, con sólo uno de fiesta –por llamarle de algún modo, porque habrá entrenamiento– de por medio. Así que en cuanto salgo de la piscina, lo básico es reposar y desconectar.
Tras salir del agua y atender a los medios de comunicación, Andrea y yo hemos estado un rato con amigos y familiares que han venido a China a vernos. Luego, tiempo libre hasta las nueve. Y mañana, o sea hoy para el lector, nos dejan dormir hasta las 9.30, algo bastante infrecuente y un verdadero chollo. No puedes salir reventada a competir.
Respecto a los nervios, les aseguro que llevar tres Juegos Olímpicos disputados no significa nada. Se te comen viva igualmente y Andrea y yo habremos ido al lavabo unas 457 veces. Eso sí, a falta de dos minutos para salir, se te pasan de golpe. Ya no hay vuelta atrás, te tiras al agua y a hacer lo que has hecho antes un millón de veces.
El 'Cubo' estaba ayer lleno con 17.000 espectadores, pero el público chino es distinto al de otras partes. Es muy silencioso y sólo parece despertar cuando aparecen sus deportistas. A mucha gente le ha sorprendido pero no a nosotras, que ya habíamos competido aquí

http://www.elmundodeportivo.es/web/gen/20080819/opi_53522860653.html

No hay comentarios: